Uno de los valores más grandes que lleva asociados un país como lo es España es sin duda la gastronomía, que es una de las más grandes señas de identidad que tiene nuestra nación. Desde luego, no en todo el mundo se puede comer tan bien como aquí. Está más que comprobado puesto que no lo decimos nosotros, sino que lo dicen los expertos internacionales en la materia. La diversidad de productos que es habitual ingerir en España constituye uno de sus más grandes reclamos. Está al nivel del clima o de nuestra historia. Y eso es mucho decir.
Una de las claves que hace que eso sea posible es que tenemos uno de los mejores campos del mundo. Vivimos en una zona geográfica que tiene unas condiciones específicas y que hace posible que en nuestra tierra se generen productos que contribuyen a que nuestra gastronomía sea de las mejores del mundo. No es una tarea fácil: desde luego, hay que hacer todo lo posible por mantener a nuestros campos inmunes de todos los peligros que pueden asediarlos, que no son pocos y que encuentran en las plagas a sus principales estandartes.
Uno de los grandes peligros que tiene el campo español es la cantidad de plagas a las que puede encontrarse expuesto a lo largo del año. La verdad es que, teniendo en cuenta algunos datos, no nos extraña que los agricultores decidan invertir tanto dinero en proteger los cultivos. Atendiendo a la información vertida por el portal web especializado Agronegocios, en el sector agrícola se pierden 6 millones de toneladas de alimentos cada año. Y buena parte de ellas tienen que ver con esas plagas de las que os estamos hablando. Y es que este problema no es, ni mucho menos, moco de pavo.
El año pasado, España se encontró expuesta a varias plagas difíciles de soliviantar. A ellas se hacía referencia en la noticia que a continuación os enlazamos, a la que hemos tenido acceso gracias a la página web de Antena 3. Esas plagas no eran otras que las de el mosquito tigre, la avispa asiática y la mosca negra. Desde luego, es evidente que no se trata de plagas cualquiera y que requieren de una atención muy intensa por parte de todos aquellos profesionales que buscan terminar con ellas, proteger el cultivo de los agricultores y hacer posible que, por ende, haya una mayor cantidad de alimentos en el mercado para nuestra ciudadanía.
Las plagas siempre han sido un peligro realmente importante para los intereses del campo español, un campo rico en la producción de buenos alimentos y de una excelsa variedad de los mismos. Los profesionales de una entidad como lo es Control Plag, dedicados a labores de protección de los nuestros cultivos entre otros asuntos, nos han comentado que, en los últimos años, los agricultores están decidiendo potenciar su inversión en esta materia para hacer de sus cultivos y de los productos que nacen de ellos algo mucho más seguro y que no esté expuestos a los peligros que experimenta la naturaleza.
El cambio climático, un enemigo peligroso
Uno de los mayores riesgos que puede asumir el campo español es el que tiene que ver con el cambio climático, que no solo está haciendo que haya menos agua para regar nuestros cultivos, sino que está potenciando la aparición de nuevas plagas que antes no conocíamos y que, desde luego, pueden suponer un verdadero problema para todos esos agricultores que, con todo su empeño, tratan de hacer crecer los productos que definen nuestra gastronomía y que la potencian a nivel mundial.
La verdad es que hay que tener en consideración este tipo de problemas porque no cabe la menor duda de que van a ir en aumento y hay que estar perfectamente preparados para hacerles frente. Desde luego, todo lo que tenga que ver con la protección de nuestros cultivos y nuestros campos es de la máxima importancia. Y, desde luego, no tenemos que escatimar nada para tratar de conseguir este objetivo, un objetivo que es fundamental y que hay que poner en valor.
No nos queda la menor duda de que los cultivos españoles van a seguir siendo los grandes garantes de los alimentos que son propios de nuestra tierra. Desde luego, el trabajo de protección de los cultivos españoles es algo que nos atañe a todos. Las instituciones deben poner de su parte para ofrecer ayudas a todas aquellas personas agricultoras que puedan ver sus cultivos amenazados por las plagas. Por otra parte y como conclusión, las empresas dedicadas a terminar con todas las plagas o a proporcionar utensilios necesarios para ello también tienen que redoblar esfuerzos y ser capaces de llegar a todos los puntos en los que alguien necesite su ayuda.